Cuando una mujer avanza no hay hombre que retroceda.
Mujeres zapatistas.
La celebración del I Encuentro de palabras, música y corazón: Lucha es nombre de mujer, fue justamente como prometía en su invitación, un gran pretexto de reunión y encuentro, aprovechando el marco del día internacional de la mujer. Desde el esfuerzo organizativo, en el que participaron no solamente los compañeros y compañeras que formamos parte del Colectivo Garrapathos, sino una red social de hombre y mujeres que creen en proyectos alternativos al status quo, se vivió una atmósfera de compañerismo donde la idea principal era escuchar la palabra de las mujeres; la palabra que ellas mismas han ido dibujando en su andar por los caminos de la lucha.
Así durante el 6 y 7 de marzo, mediante pláticas en mesas-redondas (que-nunca-son- redondas); mediante imágenes, danza y música, se juntaron muchas lunas (¿y por qué no? muchos soles) que nos compartieron su palabra, sus sueños, su arte, su conocimiento.
El encuentro comenzó con el cacerolazo-batukada a cargo de Ruidos Urbanos en Rebeldía recorriendo las calles de la colonia Vista Alegre Maxei, invitando a los colonos a sumarse en esta fiesta. Luego, la proyección del documental sobre la violencia hacia las mujeres en comunidades de Oaxaca nos hizo reflexionar sobre estos hechos cotidianos y la necesidad de nombrarlos, como lo sintieron el grupo de estudiantes que produjeron dicho material. De ahí nos arrancamos con el diálogo de las compañeras que participaron en la mesa Muchas manos y muchas lunas: el trabajo colectivo, la cual congregó en un mismo espacio a punks, indígenas, maestras, trabajadoras, estudiantes y colonas, todas ellas compartiendo sobre sus propias experiencias, sobre su lucha diaria que como mujeres, viven en diferentes ámbitos de la sociedad.
Después de tanta plática, y con la luna posicionada en esa noche queretana, le dimos su lugar a las expresiones artísticas con la inauguración de la exposición LunARTE, en donde la pintura, escultura, el performance y la música, evocaron diferentes manifestaciones femeninas desde la visión de seis artistas queretanas. Para continuar con la fiesta, disfrutamos de un sabroso Guakarrokerpop y del SoundsystemA, que nos dejaron con musiquita por dentro para continuar la jornada del día siguiente.
Después de tanta plática, y con la luna posicionada en esa noche queretana, le dimos su lugar a las expresiones artísticas con la inauguración de la exposición LunARTE, en donde la pintura, escultura, el performance y la música, evocaron diferentes manifestaciones femeninas desde la visión de seis artistas queretanas. Para continuar con la fiesta, disfrutamos de un sabroso Guakarrokerpop y del SoundsystemA, que nos dejaron con musiquita por dentro para continuar la jornada del día siguiente.
Al otro día la cita fue más temprano, y la mesa de Lo propio de la Luna: lo femenino, género y feminismo, nos puso en perspectiva la noción de las mujeres que desde la academia han estudiado, cuestionado y propuesto nuevas formas del ser y hacer mujer, así debatimos sobre las posibilidades de una nueva forma de relación entre los géneros, por supuesto que dada la naturaleza y participantes de la mesa, la discusión no se hizo esperar lo que le puso la nota polémica al encuentro, finalmente aquí se podían escuchar todos los puntos de vista. Y ya para aligerar los ánimos la capoeira femenina Mulheres de Querétaro hizo lo suyo, con su danza guerrera y el sonido de los tambores.
Con la mesa de El baile y el color de las estrellas: cultura y comunicación, las músicas, teatreras, comunicólogas y artistas nos enseñaron la otra cara de la luna en donde la subjetividad se convierte en herramienta de lucha, con esta mesa finalizamos la parte de diálogo-discusión, para entrarle de lleno al performance y la música, con La Voz del Alma, Bossanova/Jazz y los Bossanónimos, mismos que nos removieron las tripas y el corazón.
Con la mesa de El baile y el color de las estrellas: cultura y comunicación, las músicas, teatreras, comunicólogas y artistas nos enseñaron la otra cara de la luna en donde la subjetividad se convierte en herramienta de lucha, con esta mesa finalizamos la parte de diálogo-discusión, para entrarle de lleno al performance y la música, con La Voz del Alma, Bossanova/Jazz y los Bossanónimos, mismos que nos removieron las tripas y el corazón.
Y así fue como a lo largo de dos días de auténtica fiesta, las lunas nos dimos el chance de compartir nuestras alegrías, tristezas, preocupaciones y opiniones, reflexionando sobre la necesidad que tenemos de contar con espacios y pretextos para hacerlo cada vez más seguido y con cada vez más fuerza. Lo único que queda por decir es que dado el balance de este Encuentro habremos de celebrar no sólo uno sino muchos, muchos más…
inches viejas... chidas
ResponderEliminarsíguele con tu vocabulario soez y no te invitamos al taller de mecánica...
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